Pintura

Acrílico sobre tabla

Año 2022

Medidas máximas de la serie: 54 x 46 cm

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Con esta serie busco capturar el eco silencioso de civilizaciones pasadas. Estas obras evocan lugares abandonados, ruinas que alguna vez fueron epicentros de vida. Restos del hombre a su paso. Soledad.

En estas pinturas, la materia se convierte en memoria. Las texturas, las formas fracturadas y las líneas difusas remiten a la fragilidad de lo construido frente al paso del tiempo. Inspirada en reflexiones como las de Walter Benjamin sobre las ruinas como contenedores de memoria colectiva, esta serie traza un mapa visual de los espacios que han sido consumidos por el olvido, pero que aún guardan rastros de significado.

El título "Vestigios Abandonados" señala la paradoja de lo visible y lo perdido: los fragmentos que quedan de lo que alguna vez fue un todo. Cada obra se convierte en una exploración de la transitoriedad, del deterioro como un proceso inevitable que revela las capas profundas de un lugar y su historia.

Para mi estas obras no son solo paisajes de un espacio o una estructura abandonada si no que son paisajes emocionales donde el espectador puede habitar por un momento, reflexionando sobre el vacío y la ausencia. Los vestigios aquí no buscan renacer; permanecen como ruinas, como marcas imborrables de una persona, de una sociedad que se desvanece, pero cuya esencia sigue hablando a través del espacio que dejó atrás. Me gustaría invitar al espectador a contemplar lo que queda cuando todo se ha ido.

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